martes, 26 de mayo de 2020

Manejo y control de las emociones en la familia

¡¡¡Hola familias!!!

Todos sabemos que la familia es el entorno donde cualquier niño/a desarrolla la mayor parte de sus competencias emocionales. Es donde el niño o la niña forja su manera de relacionarse con los demás, de reaccionar a las situaciones diversas... 

Así, cuando se genera un clima familiar saludable, basado en respeto y emociones positivas; cuando los miembros de la familia son capaces de identificar sus  emociones y manejarlas (sin dejar que las emociones les dirijan a ellos); no solo es bueno para el bienestar de toda la familia, sino que el niño o la niña va aprendiendo esas cosas fundamentales para su desarrollo...  Por ello,  es tan importante intentar seguir desarrollando la inteligencia emocional en el seno de nuestra familia:  esforzarnos en expresar nuestras emociones y manejarlas de un modo adecuado. Por eso, queremos compartir con vosotr@s:

ALGUNOS CONSEJOS SOBRE CÓMO MANEJAR LAS EMOCIONES EN LA FAMILIA

Aprender a identificar y reconocer tus emociones. ¿Cuáles son los desencadenantes de mis diferentes estados emocionales?  ¿Cómo me siento en esos momentos? ¿Cómo me comporto?

Expresar todas vuestras emociones a todos los miembros de la  familia. Decirles cómo te sientes, con calma y con confianza. Es mejor explicar que uno está enfadado o triste y por qué, que responder con gritos sin que los demás entiendan el por qué.

Conocer a vuestros familiares y aprender a reconocer sus estados emocionales. Desarrollar juntos la empatía e intentar entendernos y ser comprensivos unos con otros.

Desarrollar un estilo de comunicación positivo. Escucha a los demás, deja que te expresen sus emociones, que cuenten cómo se sienten. No juzgues, ni infravalores: es importante que se sientan en confianza para expresarse. Emplear la asertividad para comunicarnos: se trata de expresar claramente lo que nos gusta o nos molesta, pero sin dañar a los demás, pidiendo respeto y respetando a los demás.

Cuidar la autoestima de todos los miembros de la familia. No ataques su autoestima con comentarios o conductas guiadas por emociones negativas.

Expresar el amor y el afecto. No escatimemos nunca en gestos o palabras de cariño. Todas las personas necesitamos afectos y nuestros vínculos se nutren de éstos...

Crear un clima positivo. Procurar, además del respeto que es básico, emplear por ejemplo el sentido del humor y reírnos juntos. Por otro lado, intentemos no tomarnos a la tremenda, cualquier acto de nuestros familiares.

Comprender que en una familia, como en cualquier entorno, hay diferentes personas, con sus diferentes gustos, maneras de ser y actuar e incluso de pensar. La tolerancia y el respeto son fundamentales para evitar los conflictos. Y las diferencias son la base de las relaciones, aquello que nos enriquece y nos completa.

Es importante que cada miembro de la familia tenga su espacio, donde pueda desarrollarse como individuo.

Fomentar las charlas y actividades en familia. Podéis jugar, salir a pasear, o simplemente apagar la televisión a la hora de la comida y dedicar ese tiempo a dialogar.


¡A CUIDAR DE ESAS EMOCIONES EN FAMILIA! 


Más información y recursos en:

Nuestra información se inspira libremente de las siguientes páginas:



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